ACAMPADA, con mayúsculas sí, porque para nosotros es un momento grandísimo. Este fin de semana de marzo se ha realizado el primer Concilio de Paz de Cetina dirigido por Jues. Nuestros chicos convivieron con las tres principales religiones monoteistas: cristianos, musulmanes y judíos intentaron resolver sus rencillas durante dos mágicos días.
La posada escogida, el albergue de Cetina, donde nos encontramos con Ernesto y Belén, dueños del albegue, bellisimas personas, a la par que excelentes cocineros. Agradecidos estamos por la acogida y hacernos sentir como en casa. ¡Amenazamos con volver!!
La ruta, camino del Cid, con el objetivo de llegar a Alhama de Aragón, visitar el precioso lago termal (los monitores hemos prometido volver solos) y volver por Contamina. Descubrimos que el camino dificil, trae muchas veces mayores recompensas que el camino fácil.
El día acabó con música y fiesta, ya que no hay mejor manera de encontrar el camino de la paz, que disfrutar de grandes momentos todos juntos.
El domingo nos despertó con juegos de pistas por Cetina, Contradanzas improvisadas, vidas locas de Quevedo y un nuevo amigo ... Don Ramón. El sacerdote de Cetina nos dio una cálida acogida, una agradable eucaristía y una bonita visita a la preciosa iglesia de San Juan Bautista. Gracias Ramón por acompañarnos y por esas cancioncillas que nos hemos apuntado para nuestro repertorio.
El desenlace, en un durísimo juicio, no tuvimos más remedio que ajusticiar a aquellos que impedían conseguir la Paz. La pena... ¡muerte por cosquillas!!
Conclusión: nuestros chicos son del mundo la luz y la sal. Ellos solos han conseguido iluminar con su luz Cetina durante estos días y todo ello nos ha dejado un buenísimo sabor, en nuestro paladar de recuerdos felices.
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